Llevo varios días pensando en la posibilidad de vivir sola durante muchos muchos muchos años. Y no es "posibilidad" el mejor término que defina mi idea, sino "probabilidad"; concibo con un 90% de ésta el hecho de estar no-acompañada (entiéndase: no emparejada) durante muchos quinquenios tal vez. A lo mejor compre un pequeño departamento, un perro (uno de sus puntos a favor es que ciertamente..no es una persona, por ende, sus actitudes no son complejas ni contradictorias. Es muy simple entenderlo y quererlo) y, eventualmente, me decida por adoptar una niña. Conseguiré una biblioteca y la llenaré de experiencias adquiridas en mis viajes, los cuales espero sean constantes antes de establecerme y tornar realidad lo anterior. Tendré que aprender labores domésticas como cocinar, lavar y planchar (a este requisito le daré el beneficio de la duda) para sobrevivir. Tendré un escritorio en donde se ubicará mi computadora, en la que podría pasar noches leyendo y escribiendo, y también muchos papeles desordenados, muy a mi estilo. Podré usar la tele en la pequeña sala frente a un sillón o en mi cuarto, no sé, pero conseguiré películas cada semana. Cuando la radio me acompañe lo hará muy ruidosamente, por lo cual será preciso encontrar vecinos muy tolerantes o muy sordos, porque de hecho habrán noches en que sólo me recueste en el sillón a mirar el techo, pensar y cantar. Ah sí, procuraré poseer un único medio de comunicación de la clase "teléfono móvil" (¿no es la vida más simple con solo uno de esos aparatos?), creo que ya es sabido lo poco que me interesa estar conectada a diario con la misma gente pegando mi oreja a un utensilio, y lo irritable que me resulta que me llamen para hablar más de media hora, salvo urgencias o buenos amigos (está bien, no desconectaré tan frecuentemente mi teléfono fijo). Supongo que algún día compraré uno que otro juego de mesa y naipes, para cuando vengan las buenas compañías y conversemos hasta el amanecer. Otros días visitaré a mi familia sin previo aviso y pasaremos buenos ratos, como ha sido siempre; otros días saldré con amigos y amigas a divertirnos, como sea que vaya a ser la "diversión" a esa edad. Mi soledad me escoltará cuando emprenda caminatas sin rumbo o salidas al cine o a comer a un sitio nuevo cada vez, siempre hay algo que hacer. Dormiré muchas horas por día cuando pueda darme el lujo, y necesitaré dos plazas para eso. Cuando adopte a una bebé me veré complementada y acomodaré horarios y muebles al nuevo deleite. Entonces, mi hogar en permanente construcción, mi experiencia, mis libros, mi música ruidosa, y mi soledad reflexiva pero placentera, les darán la bienvenida a todos, incluyendo paracaidistas.
Cada vez que pienso en todo esto, la idea se vuelve más y más agradable. Ah, y ¿por qué no emparejada? Pues porque no entiendo a las personas, y no sé explicarlo de otra forma. El día que encuentre algo que realmente me satisfaga no dudaré en escribir sobre ello.