8 de octubre de 2008

Tengo hambre.


El día que vea realmente algo como eso, podré morir tranquila; mientras tanto vivo disfrutando de observar todos los detalles que se me cruzan por la cara..y a veces siento que es igual de bueno que lo primero. No me puedo limitar a ver siempre lo mismo. Necesito ver gestos, maneras de actuar, miradas, entornos, pistas, la gente dentro de los carros..qué podrían estar pensando, la gente que camina..los que caminan de manera mecánica y no se preguntan por qué no se detienen UN minuto para hacer NADA, la gente que camina por el placer de caminar y de sentir el aire, la vida, la libertad de poder respirar, de detenerse cuando quieran. Las luces, los colores, las formas. No hay límites respecto a lo que podemos observar..es libertad pura..
Creo que mis ojos suelen ser muy hambrientos.
Pero, me retracto, siento que hoy puedo morir tranquila.

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